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HUMANISTAS MEXICANOS

 

HUMANISTAS MEXICANOS



RAFAEL DELGADO
Miembro de la Academia Mexicana de la Lengua
Generación 1855
Nació en Córdoba, Ver., el 20 de agosto de 1853; falleció en Orizaba, Ver., el 20 de mayo de 1914. Ingresó en la Academia en 1896 como numerario; silla que ocupó: XII (2º).


Nació en Córdoba -Villaverde- el 20 de agosto de 1853. En Orizaba -Pluviosilla- murió el 20 de mayo de 1914. Se consigna la circunstancia de las dos ciudades veracruzanas, porque el apego y devoción por ellas explica en una gran proporción las características de su obra.    Poeta, cuentista, narrador, autor dramático, sobresale como novelista, hasta el grado de que alguno lo considere como el mejor que haya nacido en México. Su nombre se encuentra situado junto a los de Emilio Rabasa, José López-Portillo y Rojas, Porfirio Parra y Manuel Sánchez Mármol, considerados los representantes de la novela realista mexicana, de ascendencia española más que francesa, o por lo menos equidistante de las dos.
   Rafael Delgado es autor de tres de las novelas de mayor renombre de la literatura mexicana de los últimos años del siglo XIX y primeros del XX: en su factura y en su tendencia puso el novelista veracruzano aquellos dones más constantes de su pluma: estilo castizo, jugoso, correcto, sin por eso renunciar a los recursos del habla popular y regional; y la observación atenta y puntual de la realidad ambiente, pero no su fotografía desnuda, sin el ropaje que le da el arte; Delgado pensó siempre que si bien la novela es historia y copia exacta de la vida mexicana, no deja de ser copia artística de la verdad.
   Procuró escribir en lengua culta, pendiente de Cervantes y de Pereda. No obstante su predilección por la pintura de paisajes nativos y por trazar cuadros de costumbres, Delgado no abusa del uso de voces populares, giros y dicciones incultas, sino, por el contrario, su lenguaje es cuidadoso, selecto, más dentro de la corriente escrita que dentro de la corriente hablada, en lo que parece reflejarse la preocupación del maestro de preceptiva literaria. Aunque se le haya señalado insistentemente influencia del realismo francés -Daudet, Goncourt, Flaubert-, más justo parece decir que viene de los españoles, principalmente Pereda, por cierta predilección y refocilamiento en las descripciones de lugares, el apego a los lugares nativos, la alusión directa a los accidentes geográficos, si bien desfigurándolos en su denominación.
   Rafael Delgado salió muy poco de sus lares nativos. Apenas una breve estancia en la ciudad de México, siendo muy joven, y un breve retorno cuando hombre; sólo una fugaz temporada en Jalisco sirviendo a la educación nacional, preocupación constante de su vida, como puede verse por los pequeños manuales de historia y de preceptiva literaria que escribió para servir a la instrucción de los jóvenes. En cambio, permaneció fiel a dos ciudades, la Córdoba de su nacimiento y la Orizaba de su muerte. Llevado de la tendencia romántica que consiste en imaginar ciudades lejanas, misteriosas y fantásticas, pero arraigado en su terruño, bautiza a la una con el nombre de Villaverde, por aludir a sus contornos, huertos y naranjales; y a la otra con el de Pluviosilla, por aludir a la lluvia, esa lluvia menuda, constante que da ese tono y ese tinte de melancolía a la ciudad de Orizaba. Esa misma tendencia lo lleva a transfigurar a Río Blanco en Albano a cuyas fértiles márgenes nos conduce con amorosa mano, lo mismo que lo hiciera José María Pereda con sus lectores a las orillas del Cantábrico. Tiene Delgado, sin embargo, otros parientes literarios en América lo mismo que en Francia. En efecto, a las influencias ya señaladas se puede mencionar con respecto a su novela Angelina, a la María de Jorge Isaacs, cuyo personaje Efraín parece gemelo de Rodolfo. ¿O será que los dos eran deudores de Chateaubriand, autor de Atala? Escribió: Antes de la boda, monólogo, Orizaba, 1899; La calandria (novela), México, 1890; 2a Orizaba, 1894; 3a México, 1916; 4a México, 1931; Angelina (novela), Orizaba, 1893; 2a México, 1895; 3a Barcelona, 1920; 4a México, 1947; Los parientes ricos, México, 1901-1902; 2a México, 1903; 3a México, 1944; Cuentos y notas, México, 1902; 2a 1953; Historia vulgar (novela corta), México, 1904; 2a México, 1904: 3a México, 1944; Lecciones de literatura, Jalapa-Enríquez, 1904; Lecciones de geografía histórica, Jalapa, 1910; Sonetos, México, 1940; Obras completas, 5 ts., Jalapa, 1953.
Fuente:
Andrés Henestrosa
Semblanzas de Académicos. Ediciones del Centenario de la Academia Mexicana. México, 1975, 313 pp.

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Agradecemos el apoyo para la realización de este proyecto de:


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